¿Porqué AURUM como título del libro? Es la palabra latina para “oro” y su raíz relacionada con el brillo del amanecer y la luz del sol. Los lingüistas trazan su linaje hasta la proto-itálica “auso-“ / “auzom-“. Esta raíz, a su vez, se remonta a la “lengua protoindoeuropea”, la madre de la mayoría de las lenguas europeas y algunas asiáticas. El símbolo químico “Au” deriva de “aurum”.
Contrario a lo pasajero, a lo desechable, “Aurum” es eternidad y permanencia: “asociado al sol, a lo imperecedero; a lo divino y a lo real en la Biblia y a la tradición cristiana”. “El oro está ligado a la gloria de Dios, la luz y la realeza espiritual”. En la literatura, Dante, en la Divina Comedia, asocia el oro al Paraíso, como “la luz pura de lo eterno”. En la filosofía para Aristóteles, “el medio áureo” (aurea mediocritas) es “el equilibrio perfecto, ni exceso ni defecto”. En el lenguaje, la “edad de oro”, el “siglo de oro”, o la “regla de oro” resumen lo más alto y valioso de una época o principio. En la Eneida Virgilio “lo emplea como imagen de pureza y la inmortalidad”. En alquimia “aurum” es la perfección suprema de la materia, el opus magnum. “Desde las máscaras funerarias de los faraones egipcios hasta las coronas y cetros de las monarquías europeas, el oro ha sido el metal que legitima el poder terrenal, conectándolo con el poder divino (el “Derecho Divino de los Reyes”).”
En la antigua Roma, “Aurum”, no era únicamente metal precioso sino, a diferencia del hierro o el cobre, no se oxida ni se degrada,” un símbolo de lo incorruptible y de lo eterno”. El vocablo “Aurum” encapsula conceptos de “luz eterna”, pureza divina, valor incalculable, poder supremo y la búsqueda de la perfección, tanto material como espiritual. Su valor simbólico: “Incorruptibilidad: el oro no se corroe, como los valores firmes que no se degradan con la moda o el ruido líquido de la sociedad”. (De ahí, puede interpretarse la diferencia entre los valores sólidos que se atesoran, cimiento de una sociedad bien estructurada, y lo superficial, lo ligero, lo fugaz, la prisa, el atropello, las características de inestabilidad de la actualidad.) “Aurum”, sería una metáfora del rescate de lo sólido, lo noble y lo eterno, frente al espejismo volátil, efímero de la sociedad actual.
AURUM: El oro perdido de los valores. (Raíces de eternidad en la actualidad de humo.)