Escritor romántico y precursor de simbolistas, decadentistas y esteticistas, fue, al tiempo que un gran poeta, un verdadero iniciador. Aún hoy géneros literarios tan consagrados como la narrativa fantástica y de ciencia ficción, la narrativa policíaca o la novela de aventuras llevan su impronta inconfundible. Fascinado por la muerte y por todas las formas del terror, dio lo mejor de su talento en sus cuentos de misterio, manifestando además un vibrante interés por lo ridículo y absurdo.