Violette Toussaint es la encargada del cementerio de un pequeño pueblo de la Borgoña y su café, su sonrisa y su conversación reconfortan a todos los que acompañan a sus seres queridos en su último viaje. La vida de Violette gira alrededor de las visitas de los recién llegados o los habituales del pueblo, de la rutina de los entierros y de ocuparse de cambiar el agua de las flores para que siempre haya un ramo fresco y alegre junto a los muertos.
Sin embargo, un día, la decisión de unos desconocidos de descansar juntos para siempre en un trozo de tierra hará que toda su vida se tambalee. Los hilos ocultos que unen a los muertos y a los vivos quedarán al descubierto y esas almas que parecían condenadas, se revelarán capaces de proyectar una luz luminosa.